La coctelería, una pasión tan antigua como la humanidad misma, ha pasado por múltiples etapas y corrientes, creando una rica y variada historia. Una de las tendencias más exóticas y cautivadoras en el mundo de los cócteles es sin duda la coctelería Tiki, una corriente que se adentra en los sabores tropicales y la cultura polinesia. Hoy exploraremos la «historia de la coctelería Tiki» y el «origen de los tragos Tiki», destapando las curiosidades de este estilo único.

Un viaje a la Polinesia a través del cristal

La historia de la coctelería Tiki se remonta a los años 30 en los Estados Unidos, durante el período de la Ley Seca. En esta época, los bares y las fiestas clandestinas proliferaban, generando una cultura de bebida muy diversificada.

Fue en 1933 cuando Ernest Raymond Beaumont Gantt, más conocido como Donn Beach, fundó el primer bar Tiki, llamado «Don the Beachcomber», en Hollywood, California. Donn, un aventurero y trotamundos, se había enamorado de la cultura polinesia durante sus viajes por el Pacífico Sur. Su intención era recrear el espíritu y la estética de estas islas en su bar, convirtiendo a «Don the Beachcomber» en el origen de los tragos Tiki.

Historia de la coctelería Tiki: Los primeros cócteles Tiki

Donn Beach, aparte de ser un excelente decorador, también tenía talento para la mezcla de bebidas. Creó una serie de cócteles inspirados en los sabores que había experimentado en sus viajes, utilizando ingredientes exóticos como rones de diferentes estilos, jugos de frutas tropicales, y especias. Entre los cócteles más destacados están el Zombie, el Navy Grog y el Mai Tai, que es considerado uno de los cócteles Tiki por excelencia.

Una curiosidad es que, para proteger sus recetas, Donn Beach las codificaba, complicando el trabajo de los bartenders que intentaban replicar sus creaciones. Estas recetas codificadas aún son objeto de especulación y estudio entre los amantes de la coctelería Tiki.

El apogeo y caída de la coctelería Tiki

El éxito de «Don the Beachcomber» fue tal que otros bares Tiki comenzaron a aparecer en todo Estados Unidos. El Trader Vic’s, fundado por Victor Bergeron, fue otro de los locales más representativos de la época. Bergeron también reclamó la creación del Mai Tai, dando lugar a una famosa disputa entre él y Donn Beach.

Los años 50 y 60 representaron la época dorada de la coctelería Tiki en Estados Unidos. Sin embargo, a finales de los 60 y durante los 70, esta moda comenzó a decaer debido a múltiples factores, entre ellos, el auge de la coctelería más minimalista y menos elaborada.

El renacimiento Tiki

A principios del siglo XXI, la coctelería Tiki comenzó a experimentar un renacimiento gracias al interés renovado en los cócteles artesanales y la cultura de la bebida de calidad. Se abrieron nuevos bares Tiki, y los cócteles clásicos Tiki volvieron a popularizarse, gracias en parte a la publicación de libros que recuperaban y desentrañaban las recetas originales.

Actualmente, la coctelería Tiki vive una nueva etapa de popularidad y reconocimiento. Los cócteles Tiki representan una mezcla única de historia, cultura y arte culinario, y son la prueba viviente de que la coctelería puede ser una ventana a otros mundos y culturas.

Curiosidades de la coctelería Tiki

1. La palabra «Tiki» se refiere a las estatuas de dioses y semidioses polinesios, que son un elemento decorativo habitual en los bares Tiki.
2. Aunque el ron es el alcohol por excelencia de la coctelería Tiki, también se usan otros destilados, como el brandy, el whisky y la ginebra.
3. El Zombie, uno de los cócteles Tiki más conocidos, tiene su nombre debido a su alta graduación alcohólica. Se dice que quien lo bebe se convierte en un «zombie».
4. La piña colada, aunque se asocia con frecuencia a la coctelería Tiki, no es un cóctel Tiki original. Sin embargo, su combinación de ron, coco y piña encaja perfectamente con el espíritu Tiki.

La coctelería Tiki es una fascinante mezcla de exotismo, historia y sabor. Su viaje desde los bares clandestinos de la Ley Seca en California, pasando por el apogeo de los años 50, hasta su renacimiento actual, la convierte en una verdadera joya de la historia de la coctelería. Así que la próxima vez que disfrutes de un Mai Tai o un Zombie, recuerda que no solo estás saboreando un cóctel, sino toda una cultura.